El “jaque” de Marcelo a las marcas chinas y estadunidenses

 UN NUEVO DESAFÍO enfrentan directivos y equipos de empresas de marcas chinas en México, ante  la noticia de que Marcelo Ebrard, secretario de Economía, tiene  negociaciones con General Motors México, que preside Paco Garza, y Stellantis México,  encabezado por Carlos Quezada, para reducir las importaciones de autos de la nación asiática, e identificar los que pueden ser manufacturados en territorio mexicano. Esto con miras a la revisión del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), y como parte del Plan Industrial y Comercial de 2024-2030, de la administración de la Presidenta Claudia Sheinbaum,  para el fortalecimiento de la industria nacional y mercado interno.

La acción que es el “coqueteo” más directo con los candidatos a la presidencia de Estados Unidos, Kamala Harris y Donald Trump, sobre la “lealtad del gobierno mexicano” al mercado del T-MEC, es la concretización de la política delineada y anunciada en el foro “Balance Económico, Desarrollo Industrial y T-MEC”, organizado en San Luis Potosí, el 20 de julio, en el que Sheinbaum marcó la pauta de negociación: “Igualdad, no  subordinación” y que, oportunamente, publicamos en este espacio a principios del pasado septiembre.

En aquella ocasión, el secretario de Hacienda y Crédito Público, Rogelio Rodriguez de la O, destacó que la expansión comercial de China también afecta a México: “Nosotros compramos…119 mil millones de dólares por año y vendemos…11 mil millones; China nos vende y nos compra, y eso no es un comercio reciproco”.

Es claro que la línea de Marcelo generará un contexto interesante, ya que motivará a las marcas chinas a continuar o iniciar la construcción de plantas en el país, con la posibilidad de incursionar al mercado Norteamericano y aprovechar el Latinoamericano, e impulsar la producción de las empresas americanas en México, particularmente referidas que, en el caso del Grupo General Motors con sus cuatro marcas: Chevrolet, la que más vende, GMC, Buick y Cadillac, presenta crecimiento en su volumen de ventas ubicándose en las 134, 994 unidades en el periodo enero-agosto; situación diferente en el caso de Stellantis cuyas marcas Peugeot, Fiat, Alfa Romeo y Jeep registran importantes crecimiento comerciales, mientras que Dodge, RAM y Chrysler registran considerables caída de ventas, lo cual implica que el Plan Industrial y Comercial que será presentado en la presente semana –de acuerdo a la misma SE- tendrá importante beneficio para este último grupo.

EN ESTA RUTA de marcas que enfrentan pérdidas de mercado, Jesús Gallo Villafranca, director general de Renault México, busca recuperar segmentos con la incorporación de Arkana, de diseño francés pero de producción coreana. Hay que destacar que la empresa del rombo registra importantes caídas de ventas desde el pasado mayo con 2,582 unidades, el 63%, junio de 1,759 unidades, el 38.7 %, julio de 717 unidades, el 19.9 % y  agosto con 662 unidades, el  21.4 %, mes en que se incorpora Jesús con experiencia en postventa y marketing. La SUV se ubica en uno de los segmentos más competidos, pero que, curiosamente como se refleja en el caso de las marcas de origen europeo de Stellantis, los diseños de la región registran gusto en el consumidor mexicano. El impacto se verá en los meses por venir.